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In an article reviewing Galdós's 1884 novel Tormento, Leopoldo Alas, also known as Clarín, recounts an anecdote in which a skeptical priest comments on unrealistic literary representations of clerical figures:
No hace mucho tiempo me decía un ilustrado sacerdote … : 'Los curas de los novelistas casi siempre son falsos: debajo de la sotana no sucede eso que ellos creen: los Jocelín son tan reales como Eurico, como Claudio Frollo, como el padre Manrique, como el abate Faujas, como monseñor Bienvenido, y como los clérigos de Champfleur y que son falsos todos: los curas, para bien y para mal, somos de otra manera.'
(Sermón perdido 70)1
The anecdotal man of the cloth establishes an antithesis between literary representations of priests and their real-life counterparts, asserting that the behavior and instincts of priests categorically deviate from those of laymen and clerical figures depicted in novels. Dissenting from his rhetorical interlocutor, Clarín commends the realist brush with which the priest Pedro Polo y Cortés, a prominent character in Benito Pérez Galdós's El doctor Centeno (1883) and Tormento, is characterized: "[M]e atrevo a señalar en el cura Polo de Tormento un cura muy probable, dibujado con gran prudencia y con un vigor a que nos tienen poco acostumbrados nuestros autores…. [N]o es ni más ni menos que un hombre de carne y hueso, de los pocos que tiene la literatura española contemporánea" (Sermón perdido 70–72).
In his prologue to the 1901 edition of Clarín's La Regenta (1884-85), Galdós describes Fermín de Pas, La Regenta's clerical protagonist, as "la figura culminante de su obra," a "personalidad grande y compleja, tan humana por el lado de sus méritos físicos, como por el de sus flaquezas morales, que no son flojas, bloque arrancado de la realidad" (Prólogo 86), and later recognizes in him an "atleta a quien se ve luchando por sostener sobre sus espaldas un mundo de exorbitante y abrumadora pesadumbre" (90). Galdós reimagines Fermín as an athlete or titan who bears the overwhelming weight of his vocation on his shoulders. As each author surveys the physiognomy of the other's literary priest, both Clarín and Galdós artfully infuse their readings with evocative images of a definitively masculine gender expression proceeding from the priesthood and...