Since slightly more than half of those countries that recognize Taiwan are located in Latin America and the Caribbean –LAC–, Taipei and Beijing have been striving to achieve diplomatic recognition in the region, using development aid as a foreign policy tool to gain diplomatic partners. This article analyzes statements by governmental officers and previous literature, as well as quantitative development aid data, in order to assess the impact of Taiwanese aid program in LAC. It concludes that Taipei has indeed some leverage to contain China’s advancement in the region, due to its status of democratic country, its history of successful development and especially its strong ties with Washington. Nevertheless, in the face of China’s renewed efforts in imposing its “One China Policy”, Taiwan’s possibilities to avoid diplomatic isolation remain uncertain.
Alternate abstract:
Dado que poco más de la mitad de los países que reconocen a Taiwán se encuentran en América Latina y el Caribe, Taipéi y Pekín se han esforzado por lograr reconocimiento diplomático en la región, utilizando programas de ayuda para el desarrollo para conseguir socios diplomáticos. Este artículo analiza las declaraciones de los funcionarios gubernamentales y la literatura anterior, así como los datos cuantitativos de la ayuda para el desarrollo, a fin de evaluar el impacto del programa de ayuda taiwanés en ALC. Se concluye que Taipéi tiene cierta influencia para contener el avance de China en la región, debido a su estatus de país democrático, su historia de desarrollo exitoso y, especialmente, sus fuertes vínculos con Washington. Sin embargo, frente a los renovados esfuerzos de China para imponer su política de “Una Sola China”, las posibilidades de Taiwán de evitar el aislamiento diplomático siguen siendo inciertas.
