Content area
Full Text
La Lupe en Nueva York, un éxito extraordinario
La exuberante cantante, La Lupe llega a Nueva York en el 1962 llena de esperanzas y sueños de continuar su exitosa carrera.
Pero la vida para una cantante en los sesenta no era fácil. La Lupe tuvo sus traspiés en sus comienzos.
No fue hasta una noche en el club La Barraca, en la calle 51 y octava avenida, donde su suerte comenzó a cambiar.
El maestro Johnny Pacheco recuerda a La Lupe "una noche mientras tocábamos en La Barraca, yo le pedí a Toño (el dueño) que la dejara cantar, fue un éxito inmediato. Fuimos grandes amigos. Al pasar el tiempo donde quiera que yo tocaba y ella llegaba me pedía el número Zarandonga y se subía a cantar con nosotros, éramos como hermanos".
Desde ese momento La Lupe comienza a incursionar en el mercado musical de Nueva York, concirtiéndose en regular en "La Barraca".
Una noche visitaba el lugar el gran músico Mongo Santamaría. Mongo había escuchado historias sobre La Lupe de sus amigos en Cuba, pero nada de lo que había escuchado se comparaba con lo que vivió esa noche.
Mongo nos dice, "esa noche ella me dedicó el espectáculo, y desde ese momento nos hicimos amigos. La compenetración fue instantánea y al poco tiempo estaba viajando con mi orquesta. Poco después grabamos "Mongo Santamaría introduce a La Lupe".
Le preguntamos a Mongo... ¿como llega La Lupe a donde Tito Puente? "Estabamos tocando en el Apollo y esta persona cercana a Tito esta viendo el espectáculo. Ella hizo el primer acercamiento. Al pasar el tiempo La Lupe esta embarazada de su primer hijo, René, y teníamos un viaje a Puerto Rico. Yo pensé que en su condición ella no debía viajar. Ella no pensaba de esa manera y tuvimos una discusión. A mi regreso ya estaba trabajando con Puente."
Mongo recordaba a La Lupe, continuó "...tremenda (La Lupe) su improvisación, su estilo era... bueno, tremenda. Un poquito alocada en sus cosas, temperamental, pero lo que decía...